Javier Larrainzar pretendía innovar y rejuvenecer sus diseños para la colección Otoño/Invierno 2010-2011 y yo me temo que no lo ha conseguido (al menos a mi parecer). Con semejantes «joyones» y líneas clásicas no hay manera de que me imagine a señoras con sus diseños. Hay algunas piezas muy bonitas, pero el desfile me ha parecido algo soso.
Para suavizar un poco, confieso que el vestido rosa me encanta 😀