No sé si es por no enfrentarme al lunes, porque los domingos de otoño tienen siempre ese toque melancólico en algún momento del día o porque sí, pero hoy tengo muchas ganas de viajar.
Ponerme el modelito (y que me quede igual de bien) de Blake Lively
Aparecer en Paris, como Carey en An education
Vivir en Londres una historia como la de Brittany Murphy en El amor y otros desastres, mientras trabajo en Vogue y vivo en un piso como el suyo:
O quizá cruzar el charco (y un continente), comprarme una casa en San Francisco, en la misma calle que la familia de Full House y ver qué vida me prepara ese otro yo americano:
Por soñar que no quede, que para algo es domingo.